none

Es gracioso como uno cambia según la persona con la que está... bueno... al menos a mí me pasa eso. Mejor no voy a generalizar porque quizás es algo que me pasa sólo a mí pero de todos modos lo voy a escribir.
En mi caso, con mis amigos no me pasa pero sí con me ha pasado con mis pololos, andantes, pareja como quiera llamarle.
No tengo una vasta experiencia en el tema ya que sólo he pololeado 3 veces pero en las 3 he sido totalmente distinta.

1- "Polos opuestos se atraen" mmm todavía no me explico cómo eso llegó a funcionar. Yo iba en el colegio, él entrando a la universidad, bueno para carretear (a mí apenas me daban permiso para salir hasta las 3:30 am y con suerte!), él estaba estudiando educación física, fanático de los deportes sobre todo del basketball (yo me escondía en el camarín cada vez que nos hacían trotar en la clase de gimnasia del colegio, soy asmática y por mí que el deporte no existiera... si me hicieran elegir un deporte favorito respondería algo como... el juego de "los países" o "las quemadas"... y no creo que eso cuente como un deporte), él era amistoso, top y muy mino (yo no soy amistosa, mucho menos "top" y no, mina tampoco), él era igual pajero (yo era matea).... bueno... resumiendo eramos totalmente distintos.
Cuando nos juntábamos el hablaba hasta por las orejas y no me dejaba decir nada... como que yo le iba a contar algo y me interrumpía para contarme otra cosa... era desesperante.
Le caía pésimo a mi mamá y a mi hermana (que lo encontraba un cabeza de músculos) y a mi papá le caía bien porque veían el tennis y conversaban de fútbol.
Bueno con este tipo tenía una personalidad muy débil... me molestaban mil cosas que nunca le dije, y siempre estaba feliz cuando nos juntabamos nose... muy raro como que no era yo misma.

2- "Personalidad fuerte v/s Personalidad Débil"... aquí fui todo al revés. Polola enojona, buena para hacer show. De repente lo sentí casi como mi subdito. Eramos compañeros en la universidad, y nos veíamos todos los días. Él me sacaba fotocopias, me pasaba la materia que me faltaba, me pasaba las tareas si es que no las había hecho... me llamaba mínimo una vez al día (y eso que nos veíamos todos los días en clases) y la llamada era de 20 -30 min.
Yo me enojaba por puras tonteras, me caían mal sus amigos ( y los sigo encontrando sacoweas con excepción de uno que otro) y por otro lado este tipo era un sentimental, era de otra ciudad por lo que echaba de menos y de repente casi que tenía que hacer de mamá y consolarlo y todo ese tipo de cosas (y para los que me conocen... saben que no soy buena para eso y tampoco es la idea tener un hijo-pololo).
Bueno en este caso debo reconocer que igual yo soy medio mandona y de personalidad fuerte a veces y como este tipo era de personalidad debil, me dejo mandonearlo y yo feliz. Por otro lado mi mamá me decía que a mí me tenían que manejar y que nunca me iba a resultar estar con alguien con quien yo pudiera hacer lo que quisiera y supongo que tiene razon porque no resultó.

3- "Pololo-amigo" mi amigo de muuuucho tiempo se transformó en mi pololo y esta fue mi relación más bakan, eramos muy distintos pero con gustos parecidos, cuando trataba de mandonearlo no me dejaba o me decía... "sí jefe" y era porque en verdad se estaba dejando mandonear solamente, no porque lo fuera a hacer siempre. Además como eramos amigos de antes podía ser yo misma sin tener que andar escondiendo cosas y bueno él también.
El único contra de esto es que ahora que terminamos no resulta ser amigos, por lo que perdí a uno de mis mejores amigos y a mi pololo.
Ahhh otro pro importante es que a mi mamá le caía bien y eso ya es harto.


De todas las formas que he sido estando con estas 3 personas la que más me ha gustado es la última, porque es cuando he sido lo más parecido a mí misma, por lo tanto cuando más cómoda me he sentido con alguien.

y... qué vendrá ahora?
bueno... espero que algo mejor pero....
como dijo Forest Gump:

"La vida es como una caja de bombones... nunca sabes cual te va a tocar"