via

Y me voy...
y se acerca el día
y tengo pena
pero lo que más tengo es miedo
no sé qué voy a hacer yo sola entre tanta gente extraña, hablando otro idioma
yo que me pongo roja cuando tengo que hablar con algun profe
que tartamudeo y tirito cuando tengo que exponer frente a mi curso
que en el colegio mandaba a una amiga a comprar al kiosko porque me daba verguenza.

tengo miedo...

pero bueno... a aperrar nomás
sigo pensando que perdí mucho cuando me decidí a hacer este viaje
pero no me arrepiento, a pesar de la pena, a pesar del miedo, a pesar del frío
porque, como todos, creo q me va a servir mucho
para madurar un poco y crecer (como persona espero y no a lo ancho :S)
si no creyera eso no iría
y bueno, yo sé que si no fuera me arrepentiría y prefiero arrepentirme de haber ido que de haberme echado pa atras.

lo unico malo es que este es mi ultimo finde aquí y yo estoy estudiando pato...
espero q la dra. se apiade de mí y me ofrezca nota.


::::::::::::: 3 días

el piano

Debo haber tenido 4 ó 5 años, porque en ese entonces vivía en Concepción todavía, cuando llegaron de visita mis nonnos (abuelos para que se entienda)y llevaron el piano que era de mi nonna, lo instalaron en mi casa y mi nonna tocaba alguna canción y yo al lado apretando teclas cualquieras típico de cabro chico y dandomelas casi de concertista... todavía me acuerdo que cuando me aburrí subí al segundo piso y les dije a mis papás si les había gustado mi canción a lo que respondieron... sisi muy linda.
Ese ese es el primer recuerdo que tengo de mi piano.

Cuando volvimos a viña, estaba condenada... mis papás me metieron a una academia o algo así, a los 6 años... iba todos los jueves o viernes, no me acuerdo bien, enseñaban instrumentos y también habían talleres de dibujo, greda y cosas para que los niños se ensuciaran.
La idea era que yo aprendiera piano, y me obligaban a practicar en la casa en un órgano que tenía apenas 3 octavas porque el piano estaba embalado en el subterraneo del edificio, y estuvo ahí varios años... hasta que me metieron a un conservatorio.
Me acuerdo que en esa epoca lo empecé a odiar, tenía como 10 años y me obligaban a practicar 1 hora diaria, las canciones me cargaban, mi profesora era un plomo y me retaba porque decía que tenia las uñas largas pero no era que las tuviera largas sino que mis uñas eran así, si me las cortaba más como que se me despegaban y dolían, pero claro ella ni tenía uñas porque se las comía.
Como a los 13 años mi mamá optó por contratar una profe particular, ella era un amor. Era rusa y me preguntaba si me gustaban las canciones antes de enseñarmelas. Me hizo clases hasta los 17 años y ahí lo dejé.

Bueno, lo dejé en el sentido de que no tomé más clases, pero sigo tocando, ahora como un hobby, sin que me obliguen y tocando sólo mis canciones favoritas.
Casi siempre cuando tengo pena, o cuando estoy muy feliz, o cuando tengo que estudiar mucho para desconectarme un poco toco mis canciones favoritas.

El "claro de luna" es mi favorita, la de mi mamá también... de echo se emociona cada vez que la toco. Sobretodo ahora que mi nonna no está porque ella también la tocaba y era su favorita.

Y todo esto porque hace como 1 año que no tocaba... y hoy se cortó la luz y no tenía nada que hacer así que busqué mis partituras y me puse a tocar
... y fue como si no tocara desde ayer
mi profe me decía que si uno dejaba de practicar se olvidaba... pero es mentira. No se olvida. Hoy lo comprobé.

A pesar de que en algún momento lo odié, creo que es el mejor regalo que mi nonna me pudo haber dejado.

y en la foto esas son mis manos, ese es mi piano